¿Cuestiones de Película?
¿Seré yo maestro? -Nunca lo fuiste, nada en este mundo lo es; ¿será cierto que solo soy ese humo que se escapa de ese, nuestro ultimo aliento? ¡Pobre de aquel que ni con su autonomía no pueda distinguir su verdadero limite porque de ellos será su propio infierno! -Vengo ahora amigos míos, ¡ni míos serán! ¡ja! con una nueva entrada como dice este blog. Podría yo ocultarmeles, pero estoy ocupado refregando la mugre que muchas veces escribo porque si, no tengo de otra mas que eso.
Yo no se porque estoy ahora aquí, de nada sirve escribir y escribir, de alguna manera el trabajo invertido debe ser retribuido para seguir y nunca parar para satisfacer las ancias del espectador que se alimenta de nuestra sangre escrita; hasta el que recoge una hoja para limpiar todo un basurero tiene un divino "gracias" para que se largue de una buena vez y no estorbe, quiero al menos eso, para que mi fastidio se vuelva grande, y siga deletreando la palabra ´destrucción´, para que convine con la palabra ´nada´.
El poema que me dije fue perfecto para seguir viviendo con el deterioro de una familia disfuncional que busca acabarse, o ni se da cuenta que ni existió el verdadero significado en el diccionario; conduzco sobre una carretera oscura, no hay silencio, lo estorban ruidos de animalejos que amenaza con su veneno; quizás muera aplastado por el pie de godzilla; quizás se levante de una buena vez el muerto que descansa en mis terrores; quizás el que conduce ese auto viaja a 1 kilómetro por hora perseguido por maleantes que desean verme desangrarme. El color se va deslizando desde las heridas provocadas, -verme agonizar y apostar cuanto tiempo permanezco vivo antes de morir.
Partiéndome los huesos llegando hasta la meta, quizás mi madre no es mi madre si no un aguado espejismo; que ésta no es mí realidad; que soy de otro mundo, ¡de Kriptón!, de marte o de una orilla hacia la izquierda tomando el lado profundo del universo, pasando por los baños interespaciales, hasta quedar como lo estuve desde iniciada la película, en el principio.
Quizás cometa el error de siempre y corte el cable negro envés del verde; quizás no tenga superpoderes que me den las ganas de cambiar las cosas en este puto mundo; quizás sea un enfermo terminal hambriento de amor que desea hacer el amor como mandan las cosas mas divinas de toda una irrealidad; quizás no tomé la oportunidad que me habían dado y la halla desaprovechado corriendo con mil venenos encima, ya a punto de que mi tiempo se acabe de una buena vez.
Quizás sea un maldito virus de computadora que este infectando a los que me leen y sueñen por si solos algo nuevo para este insignificante mundo, quizás sea la escena suicida de la parte final que nadie había, ni tenia en sus planes. Quizás yo sea mera oscuridad, en vez de luz. Quizás sea una biblioteca y sus puertas con llave, ansiosa de ser leída, quizás yo sea el que mi documento de identidad me dice que soy. Quizás mi sombra me haya matado hace ya bastante tiempo y sea un reflejo del pasado en un futuro monitor visto por solo una persona que no soy yo. Quizás esa persona esté sola; quizás después de todo, mi recuerdo le este brindando compañía; quizás después de todo, sirvo de algo.
Mario Alberto Bermúdez Gómez
Poeta, estudiante, y psicologo de Dios
Yo no se porque estoy ahora aquí, de nada sirve escribir y escribir, de alguna manera el trabajo invertido debe ser retribuido para seguir y nunca parar para satisfacer las ancias del espectador que se alimenta de nuestra sangre escrita; hasta el que recoge una hoja para limpiar todo un basurero tiene un divino "gracias" para que se largue de una buena vez y no estorbe, quiero al menos eso, para que mi fastidio se vuelva grande, y siga deletreando la palabra ´destrucción´, para que convine con la palabra ´nada´.
El poema que me dije fue perfecto para seguir viviendo con el deterioro de una familia disfuncional que busca acabarse, o ni se da cuenta que ni existió el verdadero significado en el diccionario; conduzco sobre una carretera oscura, no hay silencio, lo estorban ruidos de animalejos que amenaza con su veneno; quizás muera aplastado por el pie de godzilla; quizás se levante de una buena vez el muerto que descansa en mis terrores; quizás el que conduce ese auto viaja a 1 kilómetro por hora perseguido por maleantes que desean verme desangrarme. El color se va deslizando desde las heridas provocadas, -verme agonizar y apostar cuanto tiempo permanezco vivo antes de morir.
Partiéndome los huesos llegando hasta la meta, quizás mi madre no es mi madre si no un aguado espejismo; que ésta no es mí realidad; que soy de otro mundo, ¡de Kriptón!, de marte o de una orilla hacia la izquierda tomando el lado profundo del universo, pasando por los baños interespaciales, hasta quedar como lo estuve desde iniciada la película, en el principio.
Quizás cometa el error de siempre y corte el cable negro envés del verde; quizás no tenga superpoderes que me den las ganas de cambiar las cosas en este puto mundo; quizás sea un enfermo terminal hambriento de amor que desea hacer el amor como mandan las cosas mas divinas de toda una irrealidad; quizás no tomé la oportunidad que me habían dado y la halla desaprovechado corriendo con mil venenos encima, ya a punto de que mi tiempo se acabe de una buena vez.
Quizás sea un maldito virus de computadora que este infectando a los que me leen y sueñen por si solos algo nuevo para este insignificante mundo, quizás sea la escena suicida de la parte final que nadie había, ni tenia en sus planes. Quizás yo sea mera oscuridad, en vez de luz. Quizás sea una biblioteca y sus puertas con llave, ansiosa de ser leída, quizás yo sea el que mi documento de identidad me dice que soy. Quizás mi sombra me haya matado hace ya bastante tiempo y sea un reflejo del pasado en un futuro monitor visto por solo una persona que no soy yo. Quizás esa persona esté sola; quizás después de todo, mi recuerdo le este brindando compañía; quizás después de todo, sirvo de algo.
Mario Alberto Bermúdez Gómez
Poeta, estudiante, y psicologo de Dios
Quizás somos los malditos que no tendrán finales felices, que no serán las sonrisas que se juntan en el atardecer de playas, que nunca tendrán vidas ejemplares dentro de un sistema o que podrán vivir aventuras al rededor del mundo desafiando la autoridad. Quizás seamos una película diaria marcada por el despertarse y el llegar a la cama, con post creditos de sueños; una película que siempre terminan con un final abierto. Quizás, al final, no podremos ser personajes de un determinado numero de minutos en el que se cuenta una vida, tal vez nos sea necesario más tiempo para llegar a ser, después de morir tantas veces -cuando la realidad nos embate- protagonista de una historia que al fin pueda ser premiada con poder ver a atrás sin chorrear dolor y sentir un revuelto de tripas ¿Será condena o premio seguir actuando?
ResponderEliminarUn Oscar por su actuación Camilo
EliminarGracias por leer :) ...si gusta compartir no me enojaria :D
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